La victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de 2024 marca el rumbo de la economía estadounidense, determinado por su agenda. Esto es lo que eso significa.
La Associated Press declaró la elección del expresidente el miércoles por la mañana después de que una victoria proyectada en Wisconsin lo mostrara con una ventaja insuperable sobre la vicepresidenta Kamala Harris en el Colegio Electoral.1
Su victoria tiene consecuencias inmediatas y de largo plazo para la economía estadounidense. A corto plazo, Estados Unidos evita la incertidumbre y las perturbaciones que podría haber causado un resultado tardío. A largo plazo, Trump tendrá la oportunidad de implementar la visión que presentó durante su campaña, aunque su capacidad para hacerlo dependerá de qué partido controle la Cámara de Representantes, y varias de esas contiendas aún no han sido declaradas ganadoras.
¿Cuál es el plan económico de Trump?
Los planes económicos de Trump, tal como los expuso durante su campaña, podrían transformar drásticamente la economía estadounidense. La agenda de Trump se centra en recortes de impuestos, reducción de regulaciones, imposición de fuertes aranceles a productos extranjeros y deportación de millones de inmigrantes.
Los principales planes económicos de Trump incluyen:
- Imponer aranceles del 60% o más a las importaciones chinas y un arancel amplio de hasta el 20% a las importaciones de todos los países.
- Extender la Ley de Empleos y Reducción de Impuestos de 2017 que vence en 2025, incluyendo el mantenimiento de tasas impositivas más bajas para las personas con ingresos altos y las corporaciones.
- Eliminar los impuestos sobre la renta en numerosas circunstancias, como las propinas y el pago de horas extras para policías, bomberos y veteranos, y los beneficios de la Seguridad Social. También ha propuesto que los préstamos para automóviles sean deducibles de impuestos.
¿Qué piensan los economistas?
Según múltiples análisis de economistas y otros expertos, la agenda económica de Trump, si se implementa plenamente, podría avivar la inflación y aumentar el déficit del gasto federal. Si los demócratas logran el control de la Cámara de Representantes, Trump tendría más dificultades para lograr que se aprueben sus propuestas impositivas, pero probablemente podría imponer aranceles de todas formas.2
Según numerosos análisis económicos, los aranceles más altos probablemente llevarían a precios más altos para los bienes importados. Costarían a los consumidores hasta 78.000 millones de dólares al año, según un análisis de la Federación Nacional de Minoristas publicado justo antes de las elecciones. Por ejemplo, una tostadora que ahora cuesta 40 dólares costaría entre 48 y 52 dólares si los aranceles de Trump se implementaran en su totalidad.3
Deportar inmigrantes también podría afectar la economía al reducir la fuerza laboral, especialmente en la industria de la construcción de viviendas, lo que posiblemente conduzca a mayores costos de vivienda a largo plazo.